Profesor Evaristo Velasco Álvarez
Cuando el médico rural inglés Edward Jenner (1749 – 1823), observó que las jóvenes que se dedicaban a ordeñar las vacas de un establo, no se contagiaban de la viruela, o su contagio era muy menor en agresividad, por lo que estudió este fenómeno y encontró que, al desarrollar y aplicar la viruela de las vacas, y administrar esto a los humanos, la enfermedad se vería bastante minimizada. A partir de entonces todo proceso de inoculación a los humanos, administrándoles el virus de alguna enfermedad, se verá disminuido por las defensas que se generan en el sistema inmunológico de quien la ha padecido, se dice que se le está administrando una VACUNA, derivado este nombre de las vacas, primeros individuos “voluntarios” y los que desarrollaron los anticuerpos para vencer a la viruela.
Podemos afirmar que el descubrimiento de Edward Jenner ha permitido salvar millones de vidas, tanto humanas como animales; se calcula que las vacunas salvan por lo menos a 3 millones de personas al año. Pero entonces una vacuna es una sustancia que se obtiene al inocular o minimizar los efectos de un virus o una bacteria, sustancia que se inyecta a un individuo sano, para que su sistema inmunológico genere las defensas en su propio individuo. Así entonces, un individuo que se contagia de algún virus o bacteria, después de que fue vacunado, sufrirá muy levemente la enfermedad, o no padecerá nada, porque su organismo ya está armado con un sistema inmunológico que hará frente a la enfermedad.
Ahora bien, todavía nos encontramos en la calle y donde quiera, personas que sostienen que las vacunas no sirven para nada y que, al contrario, sólo provocan debilitamiento y hasta la muerte; aseguran que las vacunas son el método elegido por los malos para diezmar a la población. Aseguran que el actual gobierno federal, y concretamente la Secretaría de Salud, sólo están buscando un método para matar gente y acabar con “sus enemigos políticos”. Que todos los seguidores de AMLO y de la 4T estamos engañados y que pronto nos convertiremos en una especie de Venezuela.
Hoy mismo (10 de enero), el presidente inauguró la pista militar en el nuevo aeropuerto “Felipe Ángeles”, y nos asegura que este aeropuerto, como el de Guadalajara, el de Monterrey, y otros más, servirán para hacer llegar la vacuna (universal y gratuita), a todos los mexicanos, comenzando por todo el personal de salubridad que atiende a los enfermos en los hospitales; luego a los adultos mayores de 60 años y a los maestros; después a todos los demás mexicanos; pero que habrá vacunas para todos los ciudadanos que la acepten, porque es gratuita; y que a finales del mes de junio, la totalidad de los habitantes de este hermoso país, estaremos vacunados.
Y, bueno, ni modo, todavía hay quienes niegan las bondades de este proceso que nos dará libertad de acción y regresará la normalidad a todo el territorio nacional. ¿Habrá una garantía mayor? Me parece muy importante mencionar que la elección de vacunarse es personal y totalmente libre. Yo les invito a todos a SÍ aceptar, para ¡Que viva México!
Comentarios
Felicidades Evaristo, por este artículo en lo personal es muy importante conocer el origen de las vacunas, excelente invitación que todos nos debemos vacunar.
La parte del Gobierno de México, hace falta claridad en la información de la adquisición de las vacunas; en la página web de la Organización Panamericana de la Salud, con fecha 11 de febrero de 2021, esta informando que a fines de enero la Organización Mundial (OMS), hizo una donación adicional al país de 190 mil pruebas rápidas de detección de antígenos de SARS-CoV-2, las mismas habían sido previamente evaluadas por el InDRE y aprobadas por COFEPRIS para su uso en el diagnóstico de pacientes sintomáticos según la definición operacional de casos vigente en el país.